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La ventaja del descenso

Por qué el ascenso del resto es positivo para Occidente

Charles Kenny

Basic Books, 2014

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Clasificación editorial

Cualidades

Innovador
Revelador

Reseña

La economía de China pronto superará a la de Estados Unidos. Los europeos ocupan una posición más alta que los norteamericanos en las mediciones de calidad de vida. Si bien estas tendencias mundiales significan que EE.UU. no puede ser el eterno árbitro político y económico del mundo, este desplazamiento presenta nuevas oportunidades. El economista Charles Kenny dice que el ascenso de los estándares de vida de las naciones en desarrollo genera mayores oportunidades para las naciones desarrolladas y los empresarios de todo el mundo. Debido a que el mundo económico no es un juego de suma cero, en el cual el avance de una nación significa el descenso de otra, el ascenso de China e India no representa una amenaza para EE.UU. Ver este crecimiento con miedo, dice Kenny, es el tipo de pensamiento falaz que alimenta el proteccionismo, la animosidad y el conflicto. Su mensaje es que la prosperidad mundial beneficia a todos y está más cerca que nunca. El futuro poscolonial está llegando, y los norteamericanos deben adaptarse. Kenny ofrece una perspectiva fresca y prometedora sobre la economía mundial. Aunque siempre políticamente neutral, getAbstract recomienda su tratado a los que busquen una visión económica general, revolucionaria y amena que respalde sus conclusiones con ejemplos esclarecedores.

Resumen

El imperio perdido

Con EE.UU. todavía recuperándose de la recesión del 2007-2008 y de sus guerras fallidas, los observadores se preguntan si Occidente ha alcanzado su cumbre económica. La economía de EE.UU. es aproximadamente 45% mayor que la de China, pero es cuestión de tiempo antes de que el trabajo de los mil 300 millones de ciudadanos de China supere la producción de 310 millones de norteamericanos. Para mediados del 2030, China será la economía dominante en el mundo, seguida por grandes avances económicos en India, Nigeria, Vietnam, Brasil e Indonesia. Las naciones en desarrollo representarán dos tercios del producto bruto interno del mundo para el 2030. China será un desafío para la política exterior de Estados Unidos y sus otros intereses en todo el mundo.

Estados Unidos puede adaptarse a esta nueva realidad, tal como lo hizo Gran Bretaña. Durante casi 90 años, Gran Bretaña fue la economía más grande del mundo, y asumió ese rol cuando China se estancó durante la década de 1860. Gran Bretaña renunció a sus ambiciones coloniales a finales de los años cincuenta y volvió a ganar su equilibrio económico incluso cuando ya no estaba en el primer lugar.

En la...

Sobre el autor

Charles Kenny, ex economista sénior del Banco Mundial, escribió Getting Better: Why Global Development Is Succeeding –And How We Can Improve the World Even More. Es asociado sénior del Centro para el Desarrollo Global y columnista de Bloomberg Businessweek y Foreign Policy.