La teórica organizacional Lynda Gratton sostiene que la pandemia del COVID-19 creó una oportunidad de oro para que las organizaciones reimaginen el trabajo, mejoren la vida de los empleados e impulsen la retención y el rendimiento empresarial. A la par de un proceso de cuatro etapas para rediseñar el trabajo, Gratton ofrece multitud de ideas prácticas y ejemplos esclarecedores. El libro inteligente y oportuno de Gratton ayudará a los líderes a dar sentido al nuevo mundo del trabajo y guiar a sus organizaciones en medio de un cambio multifacético.
La pandemia del COVID-19 provocó el mayor cambio en el mundo laboral que se recuerde.
La necesidad de cambios en el lugar de trabajo existía antes del COVID-19 y la pandemia lo aceleró. Los líderes de muchas organizaciones se habían dado cuenta de que la automatización y los cambios en la sociedad exigían nuevas formas de trabajar: la necesidad parecía especialmente clara en lo que respecta a la rápida recualificación de los empleados, la creación de plantillas más diversas y el ofrecimiento de opciones de trabajo más flexibles. Sin embargo, en términos de su estructura, procesos, cultura y prácticas, las organizaciones tienden a funcionar en piloto automático. Este estado “congelado” suele descongelarse solo ante una amenaza externa. Es posible que el cambio se produzca en respuesta a esa amenaza, pero entonces las organizaciones se vuelven a congelar.
Cuando sobrevino la pandemia, las empresas de gran parte del mundo se descongelaron simultáneamente y comenzaron a transformarse con rapidez. Las empresas empezaron a ofrecer modalidades de trabajo alternativas, como el trabajo a distancia y las semanas laborales comprimidas. Las personas...
Comentarios sobre este resumen