Excedente cognitivo

Creatividad y generosidad en la era conectada

Penguin, 2010

15 mins. de lectura

10 ideas fundamentales

Audio y Texto

¿De qué se trata?

Casi dos mil millones de personas pasan más de un billón de horas al año en Internet. Eso es un “excedente cognitivo”. Ahora, ¿qué harán con él?

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Clasificación editorial

Cualidades

Innovador

Reseña

Este libro inteligente, con sus fascinantes referencias históricas y científicas, arroja luz sobre un aspecto central de la vida en el siglo XXI – qué hace la gente en Internet, de forma activa y conjunta, con el tiempo que solía dedicar a ver televisión pasivamente y en soledad – y permite ver con nuevos ojos este fragmento de experiencia humana. Clay Shirky explica de forma inteligente y aguda la forma en la que Internet y sus medios de comunicación social en manos de casi dos mil millones de personas que tienen más de un billón de horas libres transforma el mundo en un lugar nuevo, optimista y apoderado. El autor menciona avances únicos y útiles, como Wikipedia, PickupPal, el Apache Project y un sinfín de otras maravillas de la Red. Si todavía no comprende el potencial de los medios sociales, lo hará cuando lea este libro excepcional que getAbstract recomienda a todo aquel que desee saber cómo y por qué Internet y los medios sociales cambian el mundo drásticamente.

Resumen

El encuentro entre los televidentes del siglo XXI y los bebedores del siglo XVIII

Durante los años 1720, Londres fue el paraíso alcohólico, específicamente de los borrachos de los bares sórdidos que acababan de migrar del campo en busca de trabajo en la capital que se extendía con rapidez. La ginebra era la bebida perfecta para estos nuevos ciudadanos urbanos, desplazados y desconcertados: era barata, fácil de hacer y mucho más alcoholizante que la cerveza. Estos ex campesinos usaban la ginebra para anestesiarse de las presiones de la vida en un entorno urbano angustiante y desconocido. Lejos de sus parientes y amigos, los nuevos londinenses se regodeaban con ginebra para poder adaptarse a una metrópolis extraña y hostil, y sobrellevar las desconcertantes rarezas de la vida citadina. El consumo de ginebra era una “reacción al verdadero problema: el drástico cambio social y la inhabilidad de los viejos modelos cívicos para adaptarse”.

Alarmados por la ebriedad pública de los bebedores de ginebra, los londinenses pidieron al Parlamento que resolviera el problema. Éste aprobó una ley tras otra contra “la producción, el consumo y la venta” de ginebra. Pero los productores...