TransformAble

El ritmo del cambio global exige vigilancia, adaptación y transformación constantes.

Las empresas que no cambian suelen fracasar por completo. La pandemia del COVID-19 obligó a muchas empresas a realizar cambios rápidos, como suelen hacer las crisis, pero ninguna empresa puede permitirse el lujo de esperar a una crisis para poner en marcha el cambio. Los líderes deben desarrollar la capacidad de su organización para un cambio profundo, haciendo de la transformación un proceso regular y una competencia fundamental.

El imperativo de un cambio más frecuente y radical ha crecido, pero la transformación sigue siendo tan difícil y desgarradora como siempre. Según McKinsey, el 70 % de los intentos de transformación fracasan. Y lo que es peor, esa cifra no ha mejorado en décadas. Esos fracasos tienen enormes consecuencias, como los cientos de miles de millones de dólares que se pierden cada año y la desaparición o la disminución de empresas que antes eran poderosas.

Las transformaciones exitosas se parecen porque emplean los elementos universales del cambio exitoso, un marco que tiene éxito en todas las industrias y organizaciones, tanto en línea como...