Diez maneras para tener mejores conversaciones

La mayoría de la gente sobrevalora sus propias habilidades de conversación.

Un sesgo cognitivo llamado efecto Dunning-Kruger explica cómo las personas que carecen de competencia en una habilidad sobrevaloran sus propias capacidades y subestiman las de los demás. Esta perspectiva errónea es válida para la comunicación; afortunadamente, con trabajo, puede convertirse en el comunicador eficaz que quizá ya cree que es.

Mantenga una pequeña charla para mantenerse sano y feliz.

Aunque la mayoría de la gente la evita, la charla trivial aporta beneficios físicos y emocionales. La gente que participa en conversaciones informales muestran una mejor salud cardiovascular y menores índices de depresión y diabetes que los que rehúyen la conversación casual. Según un estudio de Harvard de 2014, el sexo, la heroína y la autodivulgación –es decir, hablar de uno mismo– activan el centro del placer del cerebro. La autodivulgación es tan placentera que muchos de los participantes en el estudio optaron por una menor remuneración, a cambio de la oportunidad de hablar de sí mismos mientras estaban en una máquina de resonancia magnética.